ENVÍO GRATIS EN PEDIDOS SUPERIORES A 75€

en pedidos en la peninsula (España) / 2-5 Días laborables

En el místico universo de los jebs, les presentamos la saga y colección «Las 7 Puertas del Alma». Esta saga nos sumerge en un viaje profundo y trascendental hacia nuestro ser interior. Cada una de estas puertas representa un pilar fundamental del alma, un ápice que, una vez desbloqueado, permite la dominación de un jeb específico. A medida que avanzamos en este camino introspectivo, nos acercamos al dominio del jeb más poderoso de todos: el Alterego. Veamos cada una de las puertas y su significado:

Primera Puerta del Alma: Pureza, dominación del Jeb de la Envidia:

Al cruzar la primera puerta, nos adentramos en la esencia de la pureza, pero nos encontramos con el desafío del Jeb de la Envidia. Este jeb nos instiga a compararnos con los demás, a sentir resentimiento y a desear lo que no tenemos. Sin embargo, al dominar este jeb, aprendemos que la pureza reside en aceptarnos y celebrar nuestra singularidad, liberándonos de la envidia y abrazando la verdadera esencia de nuestro ser, instigando la liberación de nuestra máxima autoestima.

Segunda Puerta del Alma: Visión, dominación del Jeb del Miedo:

En la segunda puerta, exploramos el poder de la visión, pero nos enfrentamos al Jeb del Miedo, que nubla nuestra perspectiva y limita nuestras posibilidades. Aquí, debemos confrontar nuestros temores más profundos y confiar en nuestra intuición para liberarnos del miedo. Al dominar este jeb, adquirimos una visión clara y audaz, capaz de trascender los límites impuestos por el miedo y alcanzar nuestras metas más elevadas.

Tercera Puerta del Alma: Dolor, dominación del Jeb de la Desesperación:

La tercera puerta nos sumerge en el reino del dolor, donde nos encontramos con el Jeb de la Desesperación. Aquí, debemos enfrentar nuestras heridas más profundas y encontrar la fuerza para superar el sufrimiento. Al dominar este jeb, descubrimos que el dolor puede ser transformado en sabiduría y compasión, y nos convertimos en seres resilientes capaces de ayudar a otros a encontrar la esperanza en medio de la adversidad.

Cuarta Puerta del Alma: Templanza, dominación del Jeb del Ansia:

En la cuarta puerta, exploramos la templanza, pero nos enfrentamos al Jeb del Ansia, una fuerza interna que nos impulsa hacia deseos desenfrenados y nos desequilibra. Aquí, debemos encontrar un punto de equilibrio, una moderación que nos permita canalizar nuestra energía de manera consciente y constructiva. Al dominar este jeb, alcanzamos una armonía interna y nos convertimos en seres más íntegros y serenos.

Quinta Puerta del Alma: Humildad, dominación del Jeb del Desprecio:

La quinta puerta nos lleva al reino de la humildad, pero nos encontramos con el Jeb del Desprecio, que nos impulsa a juzgar y menospreciar a los demás. Aquí, debemos dejar de lado nuestro ego y aprender a valorar a todos los seres humanos como iguales, y tener consciencia de que cualquier persona puede conseguir lo que se proponga materializándolo en su mente como deseo como primera instancia. Al dominar este jeb, cultivamos una humildad genuina que nos permite conectar con los demás desde un lugar de comprensión y empatía.

Sexta Puerta del Alma: Amor, dominación del Jeb del Orgullo:

En la sexta puerta, exploramos el poder del amor, que es la única forma de poder empujar al jeb del orgullo hacia la séptima puerta, y solo unos pocos son merecedores de ello. Aquí nos enfrentamos al Jeb del Orgullo, que nos impide amar incondicionalmente y nos separa de los demás. Debemos reconocer que el amor auténtico trasciende el ego y requiere humildad. Al dominar este jeb, nos abrimos a amar incondicionalmente, liberándonos del orgullo y experimentando una conexión profunda con el mundo que nos rodea.

Séptima Puerta del Alma: Misericordia, Reconexión con el Jeb Primigenio, Alter ego:

Finalmente, llegamos a la séptima puerta, la puerta del Alma misma. Aquí nos encontramos con el Alterego en su máxima expresión. Entramos en un contexto de diálogo interno con nosotros mismos, y comprendemos que el verdadero poder de un ente sobre otro es saber que lo tiene y no utilizarlo. Este canal dualista entra Dios como fuente de la misericordia, llegando a perdonarnos a nosotros mismos. Es en este punto en el que comprendemos que, aunque hemos dominado cada jeb individual, el verdadero crecimiento radica en la compasión y el perdón hacia nosotros mismos y los demás. A través de la misericordia, aprendemos a integrar todos los aspectos de nuestro ser y a elevarnos hacia la trascendencia del Alterego, el jeb primigenio.

«Las 7 Puertas del Alma» es una colección única que trasciende lo tangible y nos invita a un viaje profundo hacia nuestra esencia. Cada puerta nos desafía, pero también nos brinda la oportunidad de crecer, sanar y alcanzar nuestro potencial más elevado. En última instancia, nos guía hacia la comprensión de que solo a través de la autenticidad y la conexión con nuestro ser más profundo podemos desatar nuestro verdadero poder interior.